Parque de atracciones
No estoy ya acostumbrado
a moverme por el barro
cuando llueve por la vida
inundando mi cabeza sin reparo,
y ahora reparo esos daños y perjuicios
que me causa este desquicio
de moverme por el borde del abismo
haciendo malabares con mis emociones,
como un parque de atracciones
con subidas y bajadas
donde sobran impresiones
y no llegan las palabras.
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